Cecilia Vicuña

Cruz del Sur: Un tejido poético de Cecilia Vicuña

Por Guillermo Soriano

El compendio lírico y visionario, «Cruz del Sur. Antología» de Cecilia Vicuña, encapsula la esencia poética de una de las voces más originales y comprometidas de la literatura chilena y latinoamericana. Esta obra es una antología, no solo de poemas, sino de momentos, de respiraciones del universo capturadas en el delicado arte de esta poeta, artista y cineasta chilena, cuya voz se alza como un puente que une el pasado con el presente, el mito con el palpitar diario, la protesta con la esperanza.

Desde sus primeras páginas, «Cruz del Sur» se manifiesta como una celebración del universo, la naturaleza, y los vínculos inquebrantables que unen al ser humano con su entorno. La autora, Cecilia Vicuña, se establece no solo como poeta, sino también como una artista integral cuya obra trasciende la palabra escrita, abrazando la visualidad, la performance y la instalación. Esta antología es una cuidadosa selección de su trabajo a lo largo de los años, recogiendo piezas que reflejan su constante evolución y su incansable búsqueda de expresión.

Vegetación

Es imposible conocer con anterioridad el curso de los ríos
el cambio de las estaciones la forestación de una montaña
el alimento de un venado la fortaleza de una reina chichimeca
las fortunas de un pensador
donde quiera que vayas mi yo te ha de convertir en la estrella vaga
de un sol cuidado
no hay puertas sagradas
nadie encumbra miradas de dos filos

el olvido me abanica
a la vuelta de mii locura
la bicicleta como un animal
que me inicia en la poesía
un manto lúcido
piernas risueñas montañas y frutos
cómo deseo llevar a cabo una obra detestable
establecerme a mí misma en lo nunca establecido
convertirme en el humo en la hoja la flor y la semilla
convertirme en el aire en la nada
que digan de mí eres la no
eres pero nunca eres
¿mentirosa? ¿idólatra? ¿bandolera?
nada de esto simple como una llama pajarito de parque
flor silvestre nube cirro nam june paik no puede conmigo
un monstruo dentro de una botella un torrente en una cajita
sudamérica de trencitas y terciopelos
la que está en todas partes y en ninguna
la que nunca quisieron ver los que utilizaban un velo como bandera.

                                                                        marzo 1970

La Cruz del Sur, ese asterismo que ha guiado a los navegantes del hemisferio austral, sirve de metáfora para la navegación que Vicuña nos invita a emprender a través de su obra. Como puntos de luz que se conectan en la vastedad negra, cada poema es una estrella, cada palabra una latitud y longitud en el mapa celeste de su pensamiento. Y es que Vicuña es una cartógrafa de lo efímero, una que marca rutas en el viento y caminos en las olas, capturando en su escritura la esencia de lo que significa estar vivo y ser parte de un todo que es a la vez íntimo y expansivo.

Cada poema de «Cruz del Sur» es una travesía. Navegamos desde «Palabrarmas» donde las palabras son armas y abrazos, hasta «Precario/Precarious» que nos hace equilibrar en el filo de la existencia, conscientes de la fragilidad que compartimos con las formas más tenues de la naturaleza. La poesía de Vicuña es una danza, un movimiento constante que es espejo del constante devenir del mundo, de sus ciclos y sus estaciones, de sus nacimientos y sus declives.

Al abrir esta antología, el lector es invitado a ser parte de una ceremonia, una que celebra la interconexión de todas las cosas y honra la memoria de lo que ha sido perdido. «Cruz del Sur» es también un acto de memoria, un recordatorio de que la poesía no solo es belleza y técnica, sino también memoria y futuro, un acto de fe en el poder de las palabras para cambiar el mundo.

Al contemplar el trabajo de Vicuña en su conjunto, uno no puede sino sentirse pequeño frente a la magnitud de su visión, y a la vez, infinitamente grande, parte de la marea de la humanidad que ella abraza en su canto. En esta obra se ha tejido una galaxia en la palma de nuestras manos, una en la que cada poema es un mundo, cada verso una vida, cada palabra un latido en el corazón del universo.

En la noche del espíritu, cuando buscamos guía en la oscuridad, «Cruz del Sur» se alza como un faro, iluminando con su fulgor poético las aguas a menudo turbias de la existencia. Cecilia Vicuña nos ofrece su obra no solo como un libro, sino como una vela, una brújula, un astrolabio con el cual podemos navegar los mares internos y externos, siempre hacia la esperanza, siempre hacia la luz de la cruz del sur, nuestro sur, el corazón poético del mundo.

Año de publicación: 2020
Número de páginas: 288
Editorial: Lumen